© Blog de la Escritora y Canalizadora Kayowa Auadawa

La escritora se hace desde la edad temprana, y se descubre a si misma, cuando un libro llega a sus manos siendo sumamente interesante que profundiza hacia ese don que pace en el alma. Oh en mi caso, estando en la playa de la isla de Tenerife una pluma cayo del cielo sin ave que volara en ese instante, justo en mi blog, en ese instante donde eran tantas las visiones que llegaban a mi que deseaba plasmarlas en una escritura exquisita. No sabía como empezar cuando esa mágica pluma llego a mi, cuando la tome con mi mano izquierda sentí la electricidad en mi mano y toda mi alma, y la tome con mi mano derecha y como si estuviera viva empece a escribí apoyándola en mi lápiz.

La primera frase era así;

"En un lugar remoto, donde las aves vuelan tan alto al son de la canción entonada y silbada, como un soneto que vibra con los rayos del Sol, y la mirada del buen observador muestra a los que son como él, el canto de la Diosa en su naturaleza viviente".

Por ello, cuando llega el momento mágico que se abre hacia el interior, sea tal como me sucedió a mi, o en un buen libro, en su lectura, le lleva hasta lugares insospechables donde transitar la visión interna. La escritora (or), siente y relatará en una finura exquisita cada personaje creado en su obra. Escribir, no solo es llegar conectarse con la esencia interna y dejarse llevar, también entra la investigación de los personajes, expresión, lenguaje, formas verbales, desarrollo y tiempos y no tiempos de los personajes en la obra. Es una labor profunda. En su igual, el músico llega a su más profundo interior hasta conectarse con la nota lírica de su espíritu, y sentir la sintonía de su alma en una sinfonía eleva superior conjugando todos los sentidos hacia su oído superior. La escritora (or), nace y se rehace desde el alma siendo una (un) amante de la prosa, del verbo, en su verbo en acción, de la esencia de los personajes de la obra.

Gracias apreciada(o) Lector

Kayowa Auadawa